Quizás algunos tengan cuentos sobre "conversaciones por MSN que alegran su día".
Esto de hablar con gente sin verla en persona, se ha vuelto costumbre en la generación net. Con un simple "Hola..." se activan los tambores del corazón, se detiene todo lo que haces sólo para mover los dedos rápidamente y buscas pintar letras en la pantalla con tanta rapidez como las palabras en tu mente.
En casos más avanzados las video llamadas funcionan [¡viva skype!] Sin embargo el movimiento "letra por letra" es el más común.
Preguntas van y vienen, sin dejar la sonrisita pícara a un lado. No arriesgas más que unos cuantos pensamientos y preferencias, a menos que te la des de estrella del 3X [a lo Diosa]
Tiembla tu mano. Un movimiento rápido al mouse cuando se prende la luz naranja o al celular cuanto suena o vibra.
Quisieras dejar a un lado cualquier cosa, no tan divertida aunque sí importantes. Adiós tarea, hola efecto MSN y piensas ¡gracias por existir!
Esto de la comunicación a impersonal no es nuevo. Antes era por cartas y menos inmediata. La emoción no se aparta de lo desconocido. Algunos no tienen idea de por qué lo hacen, otros lo toman más en serio y aprovechan para hacer intercambios culturales.
Igual es ¡lo máximo! Cero rollos. Que si no luce, huele, camina, baila, canta. Aquí para unos es físico, gustos, oportunidad; para otros es cerebro, inventiva, creatividad y pensamiento.
Cada mensaje es un trocito de la persona. Disfrútalo. Los minutos compartidos crean una amistad. Valórala. El consejo oportuno puede ayudar a cambiar de ruta. Escríbelo. Todo lo demás depende del momento.
Es posible que puedas conocer las personalidades más increíbles que se encuentras a kilómetros de distancia terrestre y a un click en Internet.
¡Ojo! Ésto, lo del efecto MSN, no ocurre con todo el mundo, por eso si no lo has vivido tampoco es para sufrir. Inténtalo, si quieres.
P.D: Exprimiré más esta mandarina pero prefiero dejarla en gajos enteros por el momento.
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