¿Cuál es el rollo con el amor?



  Estos autoescritos que dicen pero no dicen están abarrotando los blogs, y me uno al equipo (para que no digan). Son más que todo las cartas para un diario o cosas tan personales que no deberían se públicas. 

     Ellas me motivan a escribir mi opinión, o al menos eso es lo que puedo entender con el enfoque dado por sus autores. Me hace preguntar por ejemplo ¿Cuál es el rollo con el amor? Es bonito y a veces se sufre, pero no como para lanzarse cuanto estado o escrito se les ocurra a las almas sensibles que quieren compartirlo con el mundo. 
         
“Un poquito de por favor” dejen el drama. No es tan difícil querer ni tan doloroso olvidar. Más cuesta guardarse el secreto y eso es mejor (afecta menos). Cualquiera que los lee se corta una vena. 
     
Porque una cosa es que transmitan un sentimiento y otra muy diferente es el nivel de tragedia que le aplican. Palabras favoritas: corazón, lágrimas, lluvia, calor, luna, dolor… ¿Qué les pasa? Cuando es porque están muy felices con alguien, son flores y sonrisas pero si andan con el guayabo es sufrimiento y oscuridad.  

El amor es un sentimiento muy bonito como para maltratarlo tanto con dilemas absurdos. Que si “me quieres y por qué”, peor cuando ponen “no eres tú, soy yo”  también aplica “más feliz que nunca” y un hablar de la exageración de letras. 

Menuda es la idea de guardarse el sentimiento o compartirlo con el que realmente le interese, y no lo hace. Los demás no le daremos el valor necesario que buscas, a menos la intensión sea llenarse de comentarios. 

No hay quien no sepa que terminaste con el o la “farmacia de turno” y más cuando te lanzas un escrito desgarrador en poema o tipo declaración, y luego se quejan de la poca privacidad.

Hay temas que se pueden compartir y gritar a todo pulmón y otros los cuales, por su tranquilidad, es preferible guardárselas para conversarlos luego en confianza. Por ello no es necesario ser tan intenso con algo que sólo a pocos les incumbe. 

Neruda no paso a la historia escribiendo de él con las mujeres sino de las mujeres con él. Alan Poe tiene trayectoria por escritos que dan miedo no por sus miedos que pone en los escritos.

Los libros de Coehlo no hablan de sus aventuras sino te invitan a vivirlas como si fueran tuyas.  Todos ellos y muchos más se pueden sugerir a la hora de invitar a las plumas a ser más colectivas.