Concurso Cartas de Amor 2010

      El señor Francisco Gutiérrez es el ganador del "Concurso Cartas de Amor" de Mont Blanc. Quedó triunfante al escribirle con el corazón a su amada esposa "Marucha" cuyas pupilas se apagaron en un eterno sueño tras 61 años de matrimonio. 




Quisiera amar tan fuerte,
querer tan grande,
sentir tan profundo,
llorar tan dolida,
para hacer brotar palabras de mi mente
tan sinceras, reales y latentes,
como el corazón que un día me quiso amar tan fuerte

Venezuela blanco y negro

         Para haber nacido en “el paraíso bendito”, como escuché decir a un turista, los venezolanos estamos teniendo poca visión multicolor. Para mí el país está estable pero no “excesivamente normal”.

Mi concepto puedo achacárselo a no haber visitado otras tierras aún, no conocer otra nación o tener poco conocimiento de la condición del "mundo exterior". Por eso sigo preguntándome ¿Es muy difícil pensar en una Venezuela donde la calidad de vida sea imperante y los muertos por “ajuste de cuentas” no sean el titular?

La noticia de apertura va dirigida a un “color” específico, el tema del día tiene un tono identificado y cada persona insulta al creyón que dibuja las hojas de este país para concluir en: “se lo llevaron y no lo devolvieron” pero todos nos quejamos y nadie nos resuelve.

¿Será más fácil hacerse el positivo y dejar que todo pase? Lo intenté, pero sólo funciona cuando tienes 12 años y tus asuntos se remiten a vencer el reto de no aburrirte. Estoy tan deprimida como el planeta y, aunque sólo yo sepa cómo se siente, se me hace obligatorio plasmarlo para el recuerdo.

Me niego a pensar que todo está “patas pa’ riba” sin embargo estoy consciente de las volteretas acrobáticas de la última década.

En los medios puedo ver los cambios concretos y al salir a la calle todo es diferente. Un panorama olvidado de vías mal asfaltadas, de faroles encendidos a la 1:00 PM, de grandes terrenos al abandono sin movimiento ni de una piedra. Da ganas de correr de nuevo a casa y esconderse del terrible tortazo con la realidad.

Pero ¿qué pasa cuando consultas con la audiencia? Te hablan de un tal “Esteban” como si fuera un wanna be de Belcebú o te dicen que los “imperialistas” acabaron con todo.

Para mí pasó como Barbarazo y en vez de llevarse el queso, acabó con el respeto de los venezolanos hacia todo. La culpa la tiene el negro por desteñirse con el sol, o el del error fue el blanco por mancharse más rápido. ¿Por qué vestirlo de un color si el país si no usa ropa? Nadie contesta *inserte sonido de grillos*

Pasan los años y así se sigue tiñendo mi Venezuela de blanco y negro. Dos colores que se ubican al extremo de la escala. No hay grises, ni sepia. Aquí o se es uno o del otro pero ambos JAMÁS (¿Por qué no se puede?). Quien o quienes dictaminaron la norma se fumaron un porrito y bajo estado “burundangoso”, firmaron el decreto para acabar con el círculo cromático al mejor estilo Terminator.

Se convirtieron es “negados al diálogo”, perdieron la paciencia, construyeron un muro de Berlín invisible en las mentes venezolanas y lo peor de todos es que no se han dado cuenta que al fin y al cabo son dos colores NEUTROS.
Ni uno es mejor que el otro, ni más bonito, ni más práctico, ni menos usado. No deben fusionarse porque son puros, pero al menos pueden darle paso al degradé y crear la paleta para que los colegas de Cabré puedan cambiarnos el panorama.